Cómo trabajar con un empleado difícil
Los empleados difíciles pueden recorrer toda la gama desde propagadores de chismes, que propagan veneno tras bambalinas, hasta trabajadores beligerantes, que se enfrentan en voz alta a otros en áreas públicas. Los empleados difíciles pueden ser excelentes para completar las tareas dentro de la descripción de su trabajo, pero es esta área gris de desempeño laboral en la que carecen de la motivación o las habilidades de las personas necesarias para encajar bien con otros empleados. Desarrollar estrategias para lidiar con estos compañeros de trabajo desafiantes puede hacer toda la diferencia en la creación de un lugar de trabajo más armonioso.
1.
Buscar formación sobre cómo relacionarse con las personas. Organizaciones como Dale Carnegie y la American Management Association ofrecen cursos sobre habilidades personales. Estos cursos enseñan cómo hablar efectivamente con alguien, incluso con un compañero de trabajo beligerante o enojado, cómo entender la posición de la otra persona y qué hacer en situaciones extremas.
2.
Comuníquese con el empleado lo más rápido posible. Una vez que surge un problema con un empleado difícil, o con cualquier otro empleado, lo mejor es resolverlo rápidamente. Mantenga la calma y pregúntele al otro trabajador su punto de vista sobre la situación. Si el otro trabajador se enoja o toma represalias, es hora de involucrar a la gerencia.
3.
Investigue cualquier problema a fondo. Si el problema es un chisme, diríjase a la gerencia junto con otros testigos. Si un compañero de trabajo se niega a hacer el mismo esfuerzo que otros miembros del equipo, lleve un registro de lo que todos hacen y acérquese a ella o a la gerencia para pedirle una solución para asegurarse de que el trabajo se distribuya de manera más equitativa. Dado que las formas en que puede ser difícil trabajar con un empleado pueden variar, piense creativamente acerca de cómo puede hacer un seguimiento de los problemas de una manera cuantificable.
4.
Alejarse del estrés. Use descansos de trabajo para caminar un poco fuera de la oficina y almuerce lejos de su escritorio. Aproveche también estratégicamente los días de vacaciones. Si sabe que un empleado difícil se toma unas vacaciones la primera semana del mes, tómese las vacaciones la segunda semana del mes. Luego tendrá un descanso de dos semanas para tratar con la otra persona.
5.
Oferta para ayudar al empleado difícil. Tómese el tiempo para considerar cuál es el problema subyacente que está causando que la otra persona actúe con dificultad o que no se ponga a trabajar. Si él simplemente está desorganizado, podría ofrecer consejos de organización. Si la otra persona le está haciendo comentarios sarcásticos, pregúntese si hay una manera de abordar el problema y resolverlo sin poner a la otra persona a la defensiva. Comprenda que sus esfuerzos pueden no ser efectivos o apreciados, pero sabrá que trató de resolver el problema.
Propina
- Nadie debe sentirse intimidado o acosado en el trabajo. Si es necesario, informe al empleado al departamento de recursos humanos y solicite que se lo reasigne a otra área lejos de esa persona.
Advertencia
- Mantén la calma y no reacciones emocionalmente. Dado que un empleado difícil puede dejar que sus emociones gobiernen sus acciones, tener dos personas molestas solo aumentará los problemas.