Cómo manejar hablar excesivamente en el trabajo
Los empleados demasiado habladores pueden tener buenas intenciones, pero a menudo interrumpen el lugar de trabajo y hacen que los compañeros de trabajo pierdan el enfoque y se vuelvan menos productivos. La administración de su fuerza laboral de manera efectiva requiere que se enfrente a los empleados problemáticos al abordar su comportamiento y explicar que se trata de un problema. Darle a un empleado demasiado hablador ejemplos de su comportamiento y explicarle que necesita ponerle fin, generalmente será suficiente para solucionar el problema.
1.
Documente qué empleados hablan demasiado y anote ejemplos de sus conversaciones excesivas.
2.
Reunirse por separado con cada empleado que habla demasiado. Evite reunirse con todos los que hablan en exceso a la vez, porque cada caso es diferente y debe tratarse por separado. Reúnase en un lugar privado donde pueda hablar con el empleado solo.
3.
Explique al empleado que habla en voz alta con demasiada frecuencia. Exprésate con calma y de una manera amistosa; no haga que el problema sea algo que sea devastador o serio.
4.
Proporcione al empleado ejemplos de cómo habla demasiado. Debido a que el empleado puede no darse cuenta de que está hablando excesivamente, es mejor darle evidencia de que lo hace. Por ejemplo, podría decir: “La semana pasada, comenzó a hablar con sus compañeros de trabajo sobre su nuevo pasatiempo durante aproximadamente 15 minutos mientras estaba en el reloj”.
5.
Explique que las conversaciones ocasionales están bien, pero el exceso de actividad hace que todos en el lugar de trabajo pierdan la concentración y se desempeñen en un nivel inferior debido a la distracción. Repase la política de su empresa para hablar en el lugar de trabajo y explique cómo puede atenuar su acto para estar de acuerdo con la política. Deje en claro que no espera que se quede completamente callado durante su turno, pero que cuando habla, necesita mantener sus conversaciones breves.
6.
Mueva al empleado a un área diferente del lugar de trabajo si es posible y si su comportamiento continúa. Si todavía habla con demasiada frecuencia, reúnase nuevamente con el empleado y explíquele que debe dejar de hablar en exceso o enfrentar una acción disciplinaria. Linda Lerner, de Boston.com, sugiere darle al empleado una fecha límite para detener sus conversaciones excesivas o enfrentar acciones que podrían resultar en advertencias documentadas y terminación.
Propina
- Determine si la conversación es perjudicial para su fuerza laboral. Si hablar en exceso está causando que los empleados pierdan el enfoque y la producción disminuya, entonces es un problema que necesita solución. Si los empleados que hablan no parecen causar un problema en el lugar de trabajo y usted no ha recibido quejas al respecto, evite el problema. Al solucionar algo que no está causando problemas en el lugar de trabajo, disminuye la moral y la producción de sus empleados.