¿Qué sucede con los empleados cuando se produce una adquisición?
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Cuando una empresa adquiere otra, los empleados de ambas compañías pueden estar inseguros y ansiosos por su futura situación laboral. Algunos escenarios mantienen las operaciones de la compañía adquirida relativamente intactas, mientras que otros resultan en muchos despidos de empleados cuando la compañía objetivo se integra en las operaciones de su nueva matriz. De cualquier manera, la transición causa cierto grado de estrés y dificultad para muchos empleados.
Comunicación y performance
Una adquisición pendiente de la empresa puede crear problemas con el desempeño de los empleados, especialmente cuando la administración no se comunica adecuadamente con respecto a los próximos cambios. Cuanto menos información comparta la administración con los empleados, ya sea que trabajen para el adquirente o la empresa objetivo, más empleados se involucrarán en la especulación sobre la próxima transacción. La comunicación mínima de la gerencia lleva a una caída en la moral de los empleados, la productividad y la satisfacción laboral. La administración efectiva de la compañía puede realizar reuniones y proporcionar comunicaciones frecuentes con los empleados para explicar los motivos de adquisición y proporcionar un plan de integración y un cronograma para que los empleados sientan que son parte del proceso.
Nueva estructura organizativa
Una vez que una compañía objetivo anuncia su adquisición inminente, los empleados quieren entender dónde encajan con la nueva compañía. La compañía adquirente generalmente se encuentra en una posición financiera superior, lo que hace que los empleados de la compañía objetivo se sientan en una posición subordinada. Los empleados que una vez están a cargo de liderar su organización pueden encontrarse sin trabajo o ocupar un nuevo puesto como ejecutivos en la nueva empresa. La gerencia debe tomar decisiones dentro de un período de tiempo corto, como 90 días, para ayudar a los empleados a mantenerse enfocados en sus obligaciones laborales en lugar de preocuparse por lo que sucederá con sus posiciones. La gerencia debe identificar y definir la nueva estructura de la organización, el nuevo liderazgo ejecutivo, otros gerentes clave y un enfoque para cuidar de los empleados cuyos trabajos se han vuelto redundantes.
Resistencia al cambio
Durante el proceso de integración de las operaciones de una compañía en otra, los empleados pueden mostrar su resistencia al cambio al continuar desempeñando sus trabajos de la manera habitual, en lugar de adoptar las nuevas políticas y procedimientos. Los empleados a largo plazo de la compañía objetivo pueden sentir que la gerencia no les está mostrando lealtad, incluso si la adquisición tiene un buen sentido comercial. La administración efectiva puede asignar a un representante de la compañía que los empleados respeten quién se esforzará por comprender las políticas y los procedimientos de la compañía objetivo y cómo los empleados estaban acostumbrados a trabajar entre sí. Esta información debe usarse para ayudar a la transición de los empleados a los procedimientos de la nueva compañía a lo largo del tiempo.
Diferentes pensamientos de los empleados
Mientras que algunos empleados experimentan ansiedad durante la transición de la compañía, otros en la compañía objetivo podrían ver la adquisición como una oportunidad para que su compañía se beneficie de los recursos financieros y administrativos adicionales de una compañía más grande y estable. Los empleados que mantienen una actitud optimista podrían aumentar sus posibilidades de nuevos roles de liderazgo o posiciones importantes dentro de la nueva empresa.